El servicio de apertura de la 30.ª Asamblea General comenzó con un llamado a "Ir", cuando el superintendente general Eugenio Duarte desafió a la congregación de más de 8,000 personas a ir y vivir la Gran Comisión.

"La carga recae en el enviado, no en el que envía", dijo Duarte. "El éxito del mensaje depende en gran medida del mensajero".

La Marcha de las Naciones abrió el servicio, destacando las 164 áreas del mundo en las que la Iglesia del Nazareno está presente. Un mensaje de bienvenida del superintendente general Fili Chambo fue seguido por un video que presentaba el enfoque de las misiones para el servicio del viernes por la noche. Nick Robertson, pastor de adoración de Bethany First Church y un grupo de ministros de alabanza de diferentes nacionalidades dirigieron a los asistentes en un momento de adoración.

El director de la Región África, Dany Gomis, dirigió un tiempo de oración antes de que Duarte subiera al escenario para entregar su mensaje. El mensaje de Duarte se basó en Juan 20:19-23, desglosando el momento en que Jesús comisionó a los 12 discípulos en tres cargos para la iglesia: ir a la luz de Jesús, ir en el nombre de Jesús e ir con la mente de Jesús.

Hizo hincapié en el envío de los discípulos con la paz de Dios y el Espíritu Santo en el versículo 22, señalando la similitud con lo que Dios hizo en Génesis 2:7.

“En Génesis 2:7, Dios terminó la majestuosa obra de la creación, respirando sobre el ser humano; y el versículo dice que era el ‘aliento de vida’, y el ser humano se convirtió en una criatura viva”, dijo Duarte. "El Espíritu Santo es vida, y Él crea en nosotros la vida que necesitamos para poder compartir a Cristo con los demás".

Para terminar, Duarte pidió a las personas enviadas como misioneros, educadores, trabajadores de la salud y funcionarios públicos que se pusieran de pie. Después de agradecerles por responder al llamado en su vida, se volvió y se dirigió a los que no estaban de pie.

"Como Jesús fue enviado, tú estás siendo enviado por Él esta noche", dijo Duarte. "Públicamente, en presencia de esta hermosa congregación, esta iglesia, su iglesia, ¿se presentarán y dirán: 'Yo iré'?"