El Centro de Alabanza y Proclamación de la Iglesia del Nazareno en Zimatlán, México, celebró los bautismos de 17 personas que también fueron recibidas como miembros en plena comunión. Más de 100 miembros de la iglesia asistieron para celebrar y ser testigos de esta expresión pública de fe en el Señor Jesucristo.

La celebración tuvo lugar en el spa Los Pinos. Antes de los bautismos, el grupo celebraba y cantaba alabanzas a Dios. El pastor de la iglesia, Juan de Dios González animó a los candidatos a bautizo a seguir siempre avanzando en su vida cristiana, y perseverar hasta el final. Enfatizó en que el bautizo no es el final de un proceso en la vida cristiana, sino al contrario, es el inicio de una caminata de toda una vida con Dios en obediencia y en santidad.

Christopher Castellanos, uno de los jóvenes bautizados, dijo que a pesar de su juventud, tenía problemas y que nada le iba bien hasta que Dios tuvo un encuentro con él y que a través de la Palabra y las alabanzas, el Señor le dio respuestas a su corazón.

“Me di cuenta de lo mucho que necesito a Dios, y desde ese momento hay cosas que han dejado de ser importantes para mí, como los videojuegos”, dijo Castellanos. “Mi pasión y deseo es saber más sobre Dios y siempre obedecerle”.

El pastor de Dios dijo que está agradecido con Dios por permitirles bautizar a las 17 personas incluso durante las secuelas de la pandemia de COVID-19. Como la mayoría del mundo, Zimatlán estuvo cerrado durante varios meses debido a la pandemia

Pero el gran desafío, según de Dios, llegó más tarde cuando las iglesias fueron reabiertas porque tuvieron que enfrentarse a una "iglesia pospandémica". Mientras que la ciudad los centros comerciales y restaurantes habían vuelto a la normalidad, parecía que la iglesia se estaba tomando el tiempo para reactivarse.

Poco a poco, la congregación ha vuelto a la normalidad y el bautismo fue un gran paso hacia la restauración de lo que tenían antes de COVID-19.

"Pudimos ver el resultado reflejado ahora con este tiempo de bautismos porque podemos ver que la iglesia y la obra de Dios están avanzando", dijo de Dios. "Ver a la gente dar este paso de fe en este momento tan crítico que hemos tenido que vivir nos fortaleció mucho y nos desafió a continuar predicando el evangelio de Cristo y a hacer discípulos a la semejanza de Cristo".

--Iglesia del Nazareno Región Mesoamérica