El incendio forestal de Highland Lakes, que estalló el lunes por la tarde cerca de Divide, Colorado, amenazó al Golden Bell Camp and Conference Center, que es propiedad de la Iglesia del Nazareno del Distrito Colorado. 

Gracias a los esfuerzos de extinción de muchas agencias de bomberos de todo el estado y al personal del campamento, además de la oración y el clima favorable, las estructuras en la propiedad Golden Bell se salvaron del incendio, que quemó 166 acres, principalmente en la propiedad del campamento.

Golden Bell Camp and Conference Center ha sido un hogar para retiros, ministerios de campamento, conferencias y transformación de vidas desde 1967. El campamento atiende a más de 4,000 estudiantes cada verano, y alberga un parque para acampar para vehículos recreativos.

Cuando se conoció la noticia del incendio el lunes, los nazarenos de todo los Estados Unidos comenzaron a orar pidiendo la protección de Dios sobre el campamento. 

El director del Golden Bell, Joel García, dijo que el fuego originalmente comenzó a atravesar uno de los valles principales del campamento; pero se detuvo. Dada la dirección del viento, García dijo que la destrucción del campamento podría haber sido catastrófica. “Si hubiera subido por ese valle; habría destruido todo el campamento”, dijo García. “Sin embargo, se detuvo, rodeó el frente [de la cresta] y luego el siguiente, que iba al este de todos nuestros edificios”.

El incendio comenzó en una casa, en una subdivisión a una milla al suroeste de la propiedad Golden Bell. A las 4:30 p. m. del lunes, 700 viviendas fueron evacuadas, desplazando a más de 2,000 personas. La oficina del sheriff del condado de Teller cree que el incendio fue iniciado por humanos; y dice que están investigando la causa, la propagación y los posibles cargos criminales que puedan surgir.

Después de que los equipos de bomberos pudieron garantizar la seguridad de los edificios del campamento, García y otros dos miembros del personal, Brent Gunn y Nathan Erich, ayudaron a los bomberos a apagar incendios dentro de 20 a 30 pies de la Capilla Dan Walker, la capilla más grande del campamento, y algunas cabañas cercanas. También ayudaron a alimentar a los socorristas que trabajaban para combatir el frente del incendio en la propiedad Golden Bell y más allá.

El resto del personal del campamento fue evacuado al cercano Woodland Park, donde el personal se reunió con algunas personas que viven cerca de la propiedad. El personal compartió sobre el campamento y Jesucristo. Un hombre incluso mostró interés en ofrecerse como voluntario.

Hasta el jueves por la tarde, la oficina del sheriff del condado de Teller y el jefe del Departamento de Bomberos de Divide dijeron que el incendio había alcanzado un 90% de contención y que a muchos de los que fueron evacuados se les permitió regresar a sus hogares.

La rápida resolución del incendio se vio favorecida por una humedad inesperada en medio de condiciones secas. A pesar de la falta de lluvia, García dijo que había una espesa capa de humedad, más pesada que la niebla, que cubrió el campamento y el fuego durante aproximadamente una hora, y ayudó a evitar que el fuego creciera aún más. Entre el aumento de la humedad y el cambio de dirección del fuego a pesar del viento, García dice que “no puede evitar decir que Dios estuvo involucrado”.

“Las oraciones del pueblo de Dios fueron escuchadas”, añadió García.