Por primera vez en décadas, el centro de Oakland, California, cuenta con una Iglesia del Nazareno en inglés. La Iglesia del Nazareno Eikon comenzó en 2020 y ha impactado radicalmente en la región de East Bay, en el norte de California.

John Huddle es el pastor plantador; y el nombre, Eikon, se basa en la palabra griega que significa semejanza o imagen. Huddle llevaba mucho tiempo dándole vueltas al término y a su relación con la propia imagen en Cristo.

"Hemos sido creados a imagen de Dios", dijo Huddle. "¿Y si esa fuera tu primera proclamación? ¿Y si cuando la gente conectara contigo, conectara con la realidad de que está hecha divinamente, creada divinamente?".

En 2019, Huddle fue ministro bivocacional en Los Ángeles mientras trabajaba a tiempo completo con World Vision como gerente nacional de compromiso con la iglesia. Ese año, Huddle y otro asociado se reunieron para almorzar con el superintendente del Distrito Norte de California, Albert Hung. Mientras se dirigían a sus coches en el estacionamiento, Hung le dijo a Huddle que llevaba nueve meses queriendo hablar con él.

Mientras hablaban, Hung le pidió a Huddle que plantara una iglesia en el área de la bahía, la segunda metrópolis más grande de California, formada por tres grandes ciudades: San Francisco, Oakland y San José. Hung pensaba específicamente en Oakland, que llevaba décadas sin contar con una congregación en lengua inglesa.

Huddle se sintió cómodo viviendo en Los Ángeles en medio de lo que caracterizó como una gran temporada de ministerio; pero prometió orar al respecto.

"Aquella noche, estaba teniendo muchas visiones sobre el ministerio", dijo Huddle. "Tuve noches sin dormir".

Dos meses más tarde, los dos volvieron a ponerse en contacto; y Huddle compartió todo lo que sentía que Dios había estado poniendo en su corazón desde su conversación en el estacionamiento. La idea era lanzar una iglesia que no centrara su identidad y su horario en torno a un servicio eclesiástico singular; sino en torno al servicio a y para su comunidad en primer lugar.

"¿Y si plantamos una iglesia no a partir de un servicio eclesiástico; sino a partir de una iglesia que hace servicio?", dijo Huddle sobre la visión.

La iglesia tiene cinco operaciones ministeriales diferentes con dos instalaciones: una en el centro de Oakland y otra cerca de Hayward. Las instalaciones de Hayward son un centro para múltiples puntos de distribución (POD por sus siglas en inglés) en todo el área de la Bahía. El centro recibe cada semana varios envíos de artículos nuevos o seminuevos de una tienda minorista que han sido devueltos y no pueden volver a las estanterías.

Los PODs se ubican dentro de iglesias, escuelas o incluso otros puntos de ministerio ya existentes. Los sitios forman parte de lo que la iglesia denomina Navidad Infinita. Cada mes, se reflexiona y se prepara, al estilo del Adviento, la efusión del amor de Dios en la vida de alguien. A través de los PODs, la iglesia espera dar equitativa y honorablemente a aquellos en la comunidad que están en gran necesidad.

La ubicación en el centro de Oakland coloca a Eikon en un lugar deseado para llevar a cabo su visión de inclinarse hacia espacios de tensión, lugares donde el ministerio podría ser difícil debido a barreras lingüísticas o financieras, y tal vez incluso el desprecio por la iglesia. Las instalaciones incluyen un POD, un ministerio de música con un espacio de grabación y un espacio para eventos.

La congregación también está construyendo una red de iglesias orgánicas y grupos de transformación de vida para personas relacionadas con el ministerio que buscan a Jesús. La iglesia también acoge el YES Program, un programa educativo de verano para niños que les enseña ciencias medioambientales a través de la lente de la fe en Dios. A través de otro proyecto, los miembros de la iglesia están ayudando a la California State University East Bay a construir pequeñas casas para los estudiantes; ya que el 10% de la población estudiantil sufre inestabilidad en materia de alojamiento.

Para Huddle, estas áreas de interés en Oakland y más allá se reducen a la proclamación del evangelio, asegurándose de que se cubren las necesidades espirituales y materiales de los residentes.

"Proclamamos el evangelio con nuestras palabras, con nuestros actos; pero también lo proclamamos con nuestro compromiso con la plenitud de la vida", dijo Huddle. "Cuando nos comprometemos con la plenitud de vida de alguien, eso proclama el evangelio".