Iglesia de Trinidad y Tobago inaugura centro de desarrollo infantil
La Iglesia del Nazareno en Arima, Trinidad y Tobago, inauguró oficialmente el centro de desarrollo infantil, “Centro de Esperanza”, a fines de 2024.
El Centro de Esperanza es un espacio creado principalmente para facilitar la integración de niños de comunidades migrantes de habla hispana en las escuelas primarias de Trinidad y Tobago. Con 16 niños actualmente inscritos en el programa, este evento marcó un hito en los esfuerzos de la iglesia local por abordar una de las necesidades más urgentes de estas comunidades.
Las crisis políticas y económicas en algunos países han aumentado significativamente la migración a Trinidad y Tobago. Los niños migrantes enfrentan numerosos desafíos, incluidas las barreras del idioma, la falta de documentación y las oportunidades educativas limitadas. Aunque el gobierno de Trinidad y Tobago permite que los menores de 18 años accedan a las escuelas públicas, muchos niños no pueden beneficiarse debido a problemas de documentación, lo que los deja en una situación vulnerable.
Cuando la iglesia en Arima comenzó a ofrecer servicios de adoración en español en 2019, la iglesia soñaba con satisfacer las necesidades educativas de los niños locales. Antes de la pandemia, la iglesia ya había puesto sus instalaciones a disposición de una agencia local para establecer un espacio dedicado a los niños. Hoy, este sueño se ha convertido en realidad gracias al trabajo de los misioneros Timothy y María Nelly Bertrand, asignados al Distrito de Trinidad y Tobago, y la coordinadora del programa local Jennifer Leach.
El Centro de Desarrollo Infantil adopta un enfoque holístico para abordar toda la gama de necesidades de los niños. Además de brindar una educación de calidad, el programa incluye actividades enfocadas en el desarrollo espiritual, la educación cristiana y el aprendizaje cocurricular en arte, música, educación física, valores y formación del carácter.
Un día típico en el centro incluye:
- Adoración matutina
- Clases enfocadas en inglés, estudios sociales, ciencias y matemáticas
- Recesos para refrigerios
- Una comida completa al mediodía
El equipo del centro está compuesto por tutores y asistentes voluntarios, incluidos maestros jubilados con experiencia en el sistema escolar local. Los voluntarios también ayudan con la preparación de comidas y actividades cocurriculares.
La respuesta de la comunidad ha sido muy positiva. Muchos niños, de entre 5 y 12 años, nunca antes habían experimentado un entorno académico formal.
En la primera reunión de padres, realizada dos semanas después de iniciadas las clases, los asistentes expresaron su gratitud y entusiasmo. Varios contaron cómo sus hijos habían comenzado a cantar canciones en inglés en casa, demostrando el progreso alcanzado en poco tiempo
El Centro de Esperanza busca brindar educación formal y crear un ambiente enriquecedor y de apoyo donde los niños puedan alcanzar su máximo potencial. La colaboración activa con los padres es clave para lograr este objetivo y garantizar que cada niño reciba el apoyo necesario en todas las áreas de su desarrollo.
--Iglesia del Nazareno Región Mesoamérica