El Proyecto Pablo, una estrategia misionera y de plantación de iglesias inspirada por el Apóstol Pablo, está impactando a muchas comunidades en todo México. Hilda, entre muchas otras situaciones, tiene un hijo internado en un centro de rehabilitación por causa de algunas adicciones, ella le dijo a Tere la necesidad de ir a compartir la Palabra de Dios a ese centro pues ella se sintió diferente desde que recibió a Jesús como su Señor, de hecho toda su familia fue evangelizada y ahora están recibiendo discipulado.

Así que Hilda fue al centro de rehabilitación, que alberga a adolescentes y adultos y consiguió que recibieran a un grupo de la iglesia. Dios tenía planes ese día, no solo para el hijo de Hilda, sino también para todos los que se encontraban en ese lugar. Cerca de las 8.30 P.M. los reunieron en una sala, allí se les compartió el plan de salvación con el “Libro sin palabras” Gigante. Para la gloria de Dios, esa noche 180 personas recibieron a Jesús como su Señor y Salvador, entre ellos el hijo de Hilda. ¡Fue una gran fiesta!, todos cantaban y alababan como si hubieran escuchado las alabanzas anteriormente, el sonido de sus voces era como de un ejercito celestial, danzaron, lloraron y entregaron sus vidas de todo corazón al Señor. La noche culminó con la predicación de la Palabra de Dios, compartida por el pastor Heriberto Ledesma.

Los jóvenes han pedido a los encargados que el grupo regrese a compartirles más de la Palabra de Dios. Karla Jordán dijo “Hermanos Oremos por todas las almas que el Señor está alcanzando y por la obra que se está haciendo en Casa de la Misericordia”.

--Church of the Nazarene Mesoamerica