Nazarenos en Bangladesh brindan alivio a una aldea sumergida después de inundaciones
Komali * es una coordinadora del Centro de Desarrollo del Niño en el Distrito Noroeste de Bangladesh. Después de que inundaciones masivas arrazaran Bangladesh en agosto, ella quería visitar uno de los CDN en un área afectada pero lo que encontró fue que todo el pueblo estaba inundado; donde quiera que miraba había agua.
La gente y el ganado estaban en los techos de zinc. La gente había perdido todo lo que poseían: sus pertenencias, su comida, su ropa. Las niñas de su escuela le suplicaban que les proveyera de ropa más que comida, aunque no habían comido durante días, porque sin ropa se veían obligadas a esconderse detrás de las hojas de los árboles.
La mayor inundación de la zona de este siglo fue causada por las altas temperaturas que crearon fuertes lluvias en las montañas del Himalaya y derritieron la nieve. Esta agua corrió por las montañas, a través de la India y Nepal, causando que los ríos se desbordaran, inundando la tierra. Debido a que Bangladesh se encuentra en la parte final de estos ríos, toda esta agua entró en Bangladesh.
Durante la noche, un tercio de Bangladesh se inundó.
Las estimaciones indican que 41 millones de personas se vieron afectadas y que hasta 1,500 fallecieron, y eso es solo durante las inundaciones. Ahora que el agua ha retrocedido, enfermedades como el cólera, el dengue y la malaria son las principales amenazas.
Cuando Komali vio a las familias sufrir, su corazón se quebrantó. Reunió de su propio dinero y de sus compañeros de trabajo y regresó al día siguiente con ayudantes y una lancha con comida y ropa.
La lancha flotaba sobre las copas de los bananales ahogados, arrozales sumergidos y pistas donde deberían estar las carreteras y los puentes. Las hojas o los árboles que alcanzaban a superar el nivel del agua estaban llenos de serpientes, hormigas y otros animales pequeños.
Después de cuatro días de estar esperando en su mayoría del tiempo de pie junto a la carretera que se encontraba en el nivel más alto en la aldea, la gente recibió su primera ayuda de socorro.
Tres semanas después de que el agua retrocediera, Komali nos llevó a mí y a mi esposa, Corry, a la aldea. Hemos estado en Bangladesh con nuestra organización sin fines de lucro, Changing Lives, para ofrecer capacitación sobre cómo utilizar prácticas de higiene para prevenir las enfermedades transmisibles. El momento de nuestro entrenamiento parece oportuno, ya que la gente necesitará todo el conocimiento ahora más que nunca, para prevenir enfermedades que pueden propagarse y exacerbarse por las aguas que retroceden lentamente.
En nuestro camino hacia el pueblo, vimos campos de arroz dañados, árboles de mango destruidos y plantas de banano devastadas. La parte inferior de las casas de ladrillo tiene un color más oscuro donde han estado bajo agua. Pero la mayoría de las casas en el pueblo tienen paredes de barro, y por esa razón están arruinadas. Los caminos sin pavimentar son fangosos y resbaladizos. En todas partes estamos dominados por el olor a escombros en descomposición, orina y heces.
Hablamos con Jacinthe *, una madre de 35 años de edad con dos hijos, de 10 y 4 años. Jacinthe es una campesina y su esposo tiene una enfermedad que lo incapacita para trabajar. Pasó ocho días viviendo en la carretera con mayor altura hasta que el agua retrocedió lo suficiente como para entrar en su casa. Mientras esperaba, recibió la ayuda de Komali el día cuatro y más tarde recibió un paquete de ayuda con comida para una semana. Mientras vivían en la carretera no tenían dónde dormir, ni qué comer durante los primeros cuatro días, no tenían acceso a agua potable, y el agua que los rodeaba era su baño.
La familia posee una pequeña casa (de dos metros por cinco), con dos habitaciones con paredes de barro, piso de barro y techo de zinc. Durante las inundaciones, perdió todo lo que tenía: ropa, comida, su cama y 20 gallinas. Su casa fue severamente dañada. Ella ha hecho algunas reparaciones en el techo y las paredes con láminas de zinc que encontró en las inundaciones. Pero Jacinthe aún necesita más madera y láminas de zinc para su casa. Sus necesidades más urgentes ahora son materiales de construcción, ropa y comida.
Ministerios Nazarenos de Compasión ha respondido a las inundaciones con paquetes de alimentos. Diez mil paquetes que contienen arroz, lentejas, papas, aceite y jabón se están distribuyendo en el Distrito Norte y Noroeste de Bangladesh. Dependiendo del tamaño de la familia, este paquete durará de cinco a 14 días.
En las comunidades que rodean a las Iglesias del Nazareno locales, aproximadamente 63,000 personas fueron afectadas, incluyendo más de 7,800 miembros de iglesias de 948 iglesias locales. MNC también está ayudando a las familias no nazarenas. El doble de la cantidad de paquetes de alimentos son necesarios, por lo que solo los más pobres recibirán ayuda en este momento.
Cómo ayudar
Ore
Por favor oren por aquellos que enfrentan la pérdida repentina e inesperada de sus seres queridos, por aquellos que perdieron sus hogares y no tienen a donde ir, y por la protección de vidas, especialmente del cólera y otras enfermedades. También ore por las iglesias que trabajan para cuidar a sus vecinos y satisfacer las necesidades urgentes.
Ofrende
Las iglesias y personas de todo el mundo pueden brindar apoyo a través del Fondo de Respuesta para las Inundación en el sur de Asia . Las donaciones se usarán para necesidades inmediatas, que incluyen tabletas de purificación de alimentos y agua, así como para la rehabilitación a largo plazo y la seguridad alimentaria.
Para enviar donaciones por correo:
En EUA, haga los cheques a nombre de "General Treasurer" y envíelos a:
Global Treasury Services
Church of the Nazarene
P.O. Box 843116
Kansas City, MO 64184-3116
Asegúrate de poner 128210 en el área de Memo
En Canadá, haga cheques a nombre de "Church of the Nazarene Canadá" y envíelos a:
Church of the Nazarene Canada
20 Regan Road, Unit 9
Brampton, Ontario L7A 1C3
Asegúrate de poner 128210 en el área de Memo
Para países adicionales, ofrende por medio de la iglesia o distrito local, designando su ofrenda para la respuesta a la inundación en el sur de Asia.
Han y Corry Tan estaban en Bangladesh brindando capacitación médica sobre la prevención de enfermedades transmisibles como el cólera. Desde Holanda, la pareja son nazarenos que trabajan en medicina y fundaron Changing Lives, que brinda capacitación a trabajadores de salud, docentes y otros en el sur de Asia sobre agua, saneamiento, higiene y cuidado dental y prevención de enfermedades relacionadas con estos.
* Nombres cambiados y ubicación omitida por razones de seguridad